Desfragmentación del disco
Estoy seguro de que nunca te has preguntado cómo funciona un disco duro por dentro y por eso te lo voy a explicar en palabras sencillas, para que lo entiendas, aunque no quieras.
Imagina el disco duro como una sucesión de cuadrados donde se pueden almacenar archivos. Normalmente, los archivos son tan grandes que ocupan varios de estos cuadrados.
En este dibujo puedes ver un ejemplo de un trozo de disco duro donde hay unos sectores coloreados. Esos son los sectores ocupados por archivos, cada uno de un color. Y hay otros sectores a continuación en blanco, que son el espacio libre que hay en el disco. Verás que los colores están todos contiguos, en este caso el disco está desfragmentado. Si quiero abrir el archivo 2, el ordenador leerá desde el sector 5 al 9 y me mostrará el archivo.
Ahora imagina que borramos el archivo 2 y 5. En ese caso, el ordenador no los borra inmediatamente, lo que hace es tachar los sectores donde están esos archivos para que sepa que se pueden borrar si es necesario.
Los sectores marcados con la X ahora cuentan como espacio libre en la unidad, aunque siguen conteniendo el archivo en su interior. Es por esto que hay programas para recuperar archivos borrados. Porque el disco duro posee un índice al principio donde están listados los archivos y los sectores que ocupa. Cuando borramos un archivo, se borra la entrada en el índice, pero no el archivo en el disco.
Ahora vamos a suponer que guardas un nuevo archivo, el archivo 7 que ocupa 6 sectores. ¿Cómo crees que lo hace el ordenador? Efectivamente, empieza por el principio rellenando los huecos hasta ocupar los 6 sectores. Y a continuación guardamos el archivo 8 que ocupa 3 sectores.
Verás que se ha empezado a liar la cosa y ahora para obtener el archivo 7 hay que obtener un trozo de un sitio y otro de otro. Imagina que estos trozos están muy separados entre sí y el plato tiene que girar mucho para ir cogiendo un sector de cada sitio por que el disco esté muy fragmentado. En estos casos el rendimiento del ordenador baja enormemente, ya que leer archivos se convierte en una tarea lenta para el disco duro y es cuando se dice que hay que desfragmentar el disco duro.
La tarea de desfragmentar lo que hace es volver a ordenar los archivos en el disco para que ocupen posiciones adyacentes y el disco duro sea rápido recuperándolos.
En los discos duros SSD no es necesario hacer esta desfragmentación porque el acceso a los datos es tan rápido que el hecho de que estén fragmentados no se nota en el rendimiento del mismo. Además, la tarea de desfragmentar consume vida útil del disco.
Asimismo, este es un problema más propio de Windows que de otros sistemas operativos basados en Unix, donde los archivos se tratan con más cuidado y se guardan en la medida de lo posible en posiciones adyacentes directamente, saltándose huecos pequeños para futuros archivos pequeños. Esto no quiere decir que no sea necesario desfragmentar, solo que no es tan importante. Incluso Windows a partir de la versión 7 tiene su propio sistema de desfragmentación automático cuando no usamos el ordenador que hace que las cosas estén un poco más ordenadas.
Si has llegado hasta aquí, entenderás por qué es posible recuperar archivos borrados de un disco duro si no se han usado los sectores donde estaban esos archivos. De ahí la importancia de parar de hacer cualquier cosa cuando te des cuenta de que has perdido un fichero, para que recuperarlo sea más viable. Y la importancia de, si vas a darle el ordenador o el disco duro a alguien, hacer un borrado seguro que consiste en escribir todos los sectores del disco con ceros varias veces para que no quede ni un resto de información que se pueda recuperar.


